Fin del TPS supone una oportunidad para que los hondureños busquen estadía legal

TPS HondurasEl TPS es un programa migratorio creado en 1990 con el que Estados Unidos concede permisos de residencia de forma extraordinaria a los nacionales de países afectados por conflictos bélicos o desastres naturales. Foto EFE/Archivo

TEGUCIGALPA, HONDURAS .- La cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS) a miles de inmigrantes de Honduras es un “duro golpe”, pero para las autoridades hondureñas supone una oportunidad para buscar la estadía legal y permanente de sus compatriotas en EE.UU.

La decisión anunciada este el viernes 5 por el Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, representa una posibilidad para que los hondureños que viven en EE.UU., incluso los que no están amparados por el TPS, puedan regularizar su situación migratoria.

“Existe la posibilidad” de que los inmigrantes hondureños que viven en territorio estadounidense puedan “regularizar” su situación migratoria antes de enero de 2020, fecha cuando vencerá el TPS, indicó a Efe el vicecanciller de Honduras, Isaías Barahona.

Aseguró que Honduras revisará “caso por caso” para establecer estrategias que ayuden a los 55.000 compatriotas beneficiaros del TPS a encontrar “el mecanismo apropiado” para permanecer legales en Estados Unidos.

El TPS para los hondureños fue concedido por EE.UU. en 1999 tras el devastador paso del huracán Mitch por Centroamérica a finales de 1998, tiempo en el que los “tepesianos” han tenido 53.500 hijos que tienen la ciudadanía estadounidense.

Barahona dijo que el Gobierno no desamparará a los “tepesianos” hondureños, que a partir del próximo 5 de julio afrontarán un período de 18 meses para retornar a su país o luchar por su permanencia en Estados Unidos.

“Probablemente no va a funcionar para todos, pero el derecho como migrantes los asiste. La Ley de Estados Unidos permite que personas que vivan en el país y tengan una circunstancia determinada puedan apelar a una residencia permanente”, explicó.

Para el vicecanciller, la decisión de EE.UU. “es lamentable”, pero aseguró que la mayoría de los hondureños amparados por el TPS respetan la ley y han cumplido “sus obligaciones” en Estados Unidos, por lo que cree que tienen “buenas condiciones” para permanecer legales en ese país.

Los inmigrantes hondureños “merecen todo respeto y cuidado de sus derechos”, subrayó Barahona, quien reconoció que el retorno de sus compatriotas al país representa “un desafío” para Honduras, considerado uno de los países más violentos del mundo.

Honduras puede perder unos 200 millones de dólares en concepto de divisas, producto de las remesas, tras el fin del TPS que permitía a miles de hondureños residir y trabajar en Estados Unidos, según estimaciones de autoridades económicas.

El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, calificó anoche como un “duro golpe” la cancelación del TPS a sus compatriotas, pero dijo que los 18 meses concedidos “se convertirán en otra oportunidad para seguir luchando por bienestar de todos los hondureños sin importar donde se encuentren”.

“Realizaremos los esfuerzos necesarios para lograr (la) regularización permanente de nuestros compatriotas amparados bajo el TPS”, indicó Hernández en un mensaje a través de Twitter.

En otro Twitter, el presidente expresó que sus compatriotas que regresen a Honduras serán recibidos con “los brazos abiertos” y que su Gobierno les apoyará para “lograr una reinserción digna e integral a su país”.

Las autoridades hondureñas calculan que, en total, unos 100.000 hondureños se beneficiaron del programa desde su inicio en 1999, aunque consideran que, actualmente, solo 55.000 personas siguen amparadas por ese permiso.

En un comunicado, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos indicó el viernes que ha decidido acabar con el TPS para Honduras después de haber evaluado las condiciones sobre el terreno y haber concluido que existe una “notable” mejora en las circunstancias que provocaron su designación, la devastación del huracán Mitch, y, por tanto, debe acabar con ese permiso.

La secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, ha determinado que la “interrupción de las condiciones de vida en Honduras por el huracán Mitch que sirvió de base para su designación del TPS ha disminuido a tal grado que ya no debería ser considerado sustancial”, explicó el Gobierno en su comunicado.

El Gobierno aseguró que ha hecho un “progreso sustancial en la recuperación posterior al huracán”, pero no detalló a qué tipo de mejoras estaba haciendo referencia.