La discusión de la legalización de 800.000 “dreamers” ha llegado a un punto álgido en el que reina la incertidumbre tanto en el congreso como en organizaciones comunitarias a nivel nacional y la comunidad estadounidense que observa la “pelea” del presidente Trump contra cualquier propuesta que no incluya su muro fronterizo con México.

Agrupaciones religiosas y activistas están entrenando a cientos de voluntarios en todo el país para que sean parte de una Red de Respuesta Rápida, capaz de movilizarse con velocidad y enviar gente que documente los arrestos de inmigrantes, les ayuden a conseguir asesoría legal y los apoyen a ellos y a sus familias a hacer frente a los procesos judiciales

El ruido que imprime la Casa Blanca, el compromiso republicano de discutir la propuesta para los jóvenes “soñadores”, y la dispersión del Partido Demócrata para sacar un real compromiso antes de  asegurar votos por el presupuesto son algunas de las condiciones que dos dirigentes y activistas pro inmigrantes en Washington DC, ven como preocupantes  de cara a la revisión legislativa del Proyecto de Ley sobre los llamados “dreamers”.