Hay una excepción importante a esta determinación, que supondrá una carga a los funcionarios de Inmigración, porque se deberá determinar el peligro de las personas para impedirles su ingreso al país, además de que los ciudadanos de esas seis naciones que tengan “una fuerte relación con una persona o entidad (escuela o empleo) en este país” se les podría permitir su entrada