Cecilia Gómez, madre de tres jóvenes, fue detenida y recluida en un centro de detención de Nogales, Arizona, después de que agentes de inmigración la interceptaran durante una cita en la oficina de Servicios de Ciudadanía e Inmigración (USCIS, por sus siglas en inglés) de Las Vegas. Gómez, de origen mexicano, estaba a solo un paso de obtener su residencia permanente, sin embargo, un problema migratorio de hace 20 años la tiene al borde de la deportación.

Miembros de la Coalición de Derechos Plenos Para Los Inmigrantes, que agrupa a más de una decena de organizaciones, grupos y sindicatos, señalaron que la reciente decisión de Donald Trump de enviar efectivos de la Guardia Nacional a la frontera debe servir de “incentivo” para que los inmigrantes exijan ese día “un alto a los ataques a la comunidad”