El joven indocumentado, de 25 años, se encontraba en una carrera contra el tiempo ya que su amparo de DACA se venció el pasado 4 de mayo y las autoridades de Inmigración insistían en rechazar la solicitud de Ramírez de renovación por sus supuestos vínculos con un grupo pandillero, por lo que estaba en riesgo de ser deportado.