Inmigración

Política de “Carga pública” de Trump debe trabajar en reducir la desigualdad, no en atacar a las familias

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Familias inmigrantes legales corren el riesgo de ser deportadas cuando soliciten un trámite migratorio como residencia o ciudadanía y se les niegue por haber hecho uso de programas de beneficio público considerados como "carga pública", según la propuesta de Donald Trump. Foto Archivo AP/Colleen Long

CHICAGO, IL.- Ante el anuncio de los planes de la administración del presidente Donald Trump de negar visas de residencia permanente a los inmigrantes que legalmente acceden a beneficios públicos de alimentos, salud o vivienda, el director ejecutivo de Alianza Americas, Óscar Chacón, sostuvo que se trata de una “propuesta miope y punitiva de ‘carga pública’, que busca abrir una brecha entre personas de bajos ingresos, según el lugar donde nacieron”.

“La verdad del asunto es que Estados Unidos se encuentra a la zaga de la mayoría de las demás naciones industrializadas al asegurar estándares mínimos de bienestar social y económico para sus residentes”, recalcó. “Estados Unidos es el país más rico y el más desigual del planeta: ese es el problema que deberíamos tratar de resolver”, dijo en un comunicado de prensa.

El dirigente cívico hizo énfasis en el millonario aporte económico de los trabajadores nacidos en Estados Unidos pero también de los trabajadores inmigrantes los cuales dijo “se desperdician en intervenciones militares fallidas en el extranjero, militarizando nuestras fronteras, deteniendo y deportando a solicitantes de asilo, y separando a familias, todo bajo el sospechoso nombre de “seguridad”.

Agregó Chacón que “mientras tanto, descuidamos las escuelas públicas, ponemos el cuidado de la salud fuera del alcance de muchas personas y recortamos apoyo para viviendas asequibles. Todos los contribuyentes estadounidenses, nacidos en los Estados Unidos y nacidos en el extranjero, merecen mejores rendimientos en sus aportaciones al fisco”.

Enfatizó que “las comunidades inmigrantes hacen enormes contribuciones a la generación de riqueza, las arcas fiscales y la riqueza cultural de los Estados Unidos, y proporcionan trabajadores muy necesarios para nuestros mercados laborales. Durante mucho tiempo, las políticas públicas han tratado a las personas nacidas en el extranjero como si fueran un pasivo para nuestra nación, a diferencia de los activos invaluables que son”.

La reacción de Alianza Americas se suma a las de numerosas organizaciones nacionales que han rechazado esta iniciativa calificándola de errónea y xenófoba.

Chacón invitó a la comunidad a pronunciarse en contra de estos cambios durante los 30 días que el gobierno dejó abiertos para comentarios del público y pidió votar en las elecciones de noviembre donde “no podemos apoyar a los candidatos que ven a los inmigrantes como chivos expiatorios en lugar de hacer políticas que nos beneficien a todos”, concluyó.

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